Todo lo Nacido de Origen Mortal
Deberá consumirse con la Tierra
Para elevarse libre de la Procreación:
Entonces, ¿qué tengo yo que ver contigo?
Los Sexos brotaron de la Vergüenza y el Orgullo,
Resoplaron en la mañana; sucumbieron al atardecer,
Pero la Misericordia transformó a la Muerte en Sueño:
Los Sexos se irguieron para trabajar y padecer.
Tú, Madre de mi parte Mortal,
Con crueldad modelaste mi corazón,
Y con lágrimas falsas y embaucadoras
Bloqueaste mi Nariz, mis Ojos y mis Oídos.
Tapaste mi Lengua con insensible arcilla,
Y me entregaste a la Vida Mortal.
La muerte de Jesús me liberó:
Entonces, ¿qué tengo yo que ver contigo?
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